martes, 18 de marzo de 2008

Chucherías Japonesas

Ayer un compañero del trabajo ( Herbert , un hombre sin pasado ), me sorprendió gratamente con un obsequio en forma de chucherías en viadas directamente de Japón.
Resulta que Herbert (un hombre sin pasado), tiene una amiga japonesa y para navidades le suele mandar una caja con productos de allí. Como Herbert (un hombre sin pasado), conoce mi pasión por probar productos raros, y si son japoneses y se comen, mejor, se le ocurrió traerme un puñado de "caramelos" de los que le mandó su amiga, la japonesa.




Aquí me dispongo a hacer una review de las chucherías que nos comimos.


Royal Jelly Candy


El envoltorio amarillo y el dibujo con forma de panal de abeja hacía pensar que se trataba de un caramelo de miel. Efectivamente lo era, un caramelo blandito, tipo sugus de miel, aunque con un regustillo mentolado al final


A este lo llamé: Avecrén Japonés

El envoltorio sospechosamente parecido al de las pastillas de avecren, hacían sospechar que se podía tratar de un producto para hacer sopa. Sorprendentemente se trataba de una especie de pastilla de chocolate... pero de color verde. La valiente en probar el avecren fue, ni más ni menos, mi suegra que según sus propias palabras "Sabe un poco a chocolate y es crujiente".


Morcilla Japonesa

Este "caramelo" que tiene pinta de ser una porción de morcilla de burgos, en realidad era sésamo. Me recordó ligeramente a las palomitas con miel por ser un cereal dulce. El color negro supongo que se conseguiría a base de tinta de calamar. Estaba bueno, aunque el hecho de que no tuviese absolutamente ninguna letra ni dibujo la bolsita, era un poco perturbador.


Tocinillo de Osaka

Por su color y tacto, esta chuche recuerda al tocino de cielo o al membrillo, por eso pensé que serí extremadamente dulce. Cual fue mi sorpresa cuando me lo llevé a la boca y descubrí una cosa más sosa que el copón. En cima era super pegajosa y el plástico se quedó medio pegado y ... to pa dentro!


Kohaku


Éste lo tengo en el bolsillo y aún no lo he abierto. Que demonios! voy a probarlo ahora mismo y hago una review en vivo!

Lo toco por fuera y cede a la presión. No es duro.
El abrefácil funciona a la perfección.
Huele muy dulce, un poco a miel.
Al cabrón le cuesta salir del envoltorio, se queda muy pegado.
La primera capa, blanda, como una cobertura de melaza, es dulce y un poco terrosa. Se queda pegada fuertemente a mis muelas.
La siguiente capa, mucho más dura, es dulce pero de un sabor extraño, no sabe al clásico caramelo, pero casi.
¿Qué hago, lo desgasto o lo muerdo? Me decido por la opción más arriesgada: lo muerdo.
No tiene relleno, es macizo. Lo mastico y trago.
No ha estado mal, de todos los que hemos probado hasta ahora es el más normal.

La Gheisa Feliz o Happy Heisa.



El diseño del papel es más cuidado que el de los demás caramelos. Podemos ver por la parte delantera una gheisa y por detrás un abanico.
El caramelo es una bola de chocolate blanco con crujiente interior.
Ta güeno.

Miel de la Granja SanMiyamoto


Caramelo blando con un regustillo a miel. Aunque apuesto mi moto a que jamás una abeja se acercó a este producto.


Kep & Rel

Caramelo de chocolate blanco con una base tipo galleta. Soseras con un regusto a menta al fina.


Air Crunky


Chocolatina estilo a las tabletas de turrón de Chocolates Suchard... peeero verde! No se que tienen los japoneses con este color... Es mas bien sosa y apuesto que de chocolate no lleva nada.


Caramelo de Perro


Por muy snoopy que sea, es un perro. Y un "producto alimenticio" que venga de japón, con el dibujo de un perro en el envoltorio, da que pensar...


Ricardo, un compañero del curro, fue el valiente en testear esta golosina. Según sus palabras:
"Es un clásico caramelo de naranja".
Si, si de naranja Ricardo, de naranja...


Pelota Blanca


Nuevamente un caramelo de algo similar al chocolate relleno de algo que recuerda vagamente a la galleta y , si, con un toque final mentolado.


CONCLUSIÓN FINAL:

La poca variedad de las chucherías es patente, formándose casi totalmente de chocolate verde, miel y regustillo a menta.
Cabe destacar el poco azúcar que le echa esta peña a los caramelos, siendo la mayoría más sosos que chuparte el codo.

Es una pena que hace unas semanas no se me ocurriese hacer fotos a otra "golosina" que nos trajo Herbert (un hombre sin pasado), que eran ni más ni menos, que tres trozos de alga dulce que daba un repelús na más verlo que paqué. No dudéis que nos las comimos.

SALUD!

3 comentarios:

Bernal dijo...

Primero: Que post más friki. Pero friki, friki.
Y segundo: No tendría huevos a probar ninguno. Eso seguro.
Salud!

Anónimo dijo...

Me he echau unas risas, y Gabriel también. Ahora te falta un review de los productos orientales que te regale yo que también eras finos.

Jose el chuchero dijo...

Hola

Si me lo permites Luis Miguel, las chuches japonesas se pueden conseguir en Chuchelandia punto es

Gracias y un saludo